Divorciados y divorciadas

La prensa británica se hace eco de una encuesta (1) a divorciados británicos que, vista de cerca, resulta tener mucho interés. Los periódicos han resaltado el hecho de que las mujeres parecen lidiar mejor con el divorcio que los varones: se sienten más liberadas, más felices, acuden menos a "cuidados paliativos" (sexo casual, cosas así), etc. En bastantes casos, esas diferencias sí parecen relevantes, aunque en otros no (por ejemplo, las comparaciones acerca de si trabajan más o menos que antes del divorcio no tienen en cuenta que la proporción de varones ocupados es bastante más alta que la de mujeres). Lo que no he visto resaltado son otros resultados de la encuesta, llevada a cabo por YouGov y disponible aquí. Lo interesante es que los resultados no resaltados pueden servir para entender esas diferencias entre hombres y mujeres.

Por lo pronto, la custodia de los hijos (si los hay, claro) recae en las mujeres en porcentajes que rondan el 80/90%. Ello limita enormemente las posibilidades que tienen los padres de ver a sus hijos. No extraña, entonces, que sean bastantes más los varones (cerca de un 15%) que las mujeres (cerca de un 1%) que citen el no ver a sus hijos como una de las tres principales preocupaciones una vez divorciados. Téngase en cuenta que tenían hijos el 60% de los matrimonios rotos, lo cual supone que uno de cada cuatro padres varones cita esa preocupación. Sólo con esto, tendríamos explicada buena parte de la menor "felicidad" que sienten los varones tras el divorcio.

Quizá más importante para explicar las diferencias de "felicidad" post-divorcio sean algunas de las causas aducidas para romper el matrimonio. Entre las mujeres, nada menos que cerca de un 20% aduce problemas de violencia doméstica (yo entiendo que del varón hacia la mujer), frente a un escaso 4% de los varones. Quizá habría que añadir la gran proporción de mujeres que aduce "unreasonable behaviour" (47%), frente a cerca de un 30% por parte de los varones. Si estas causas son reales, no extraña que muchas más mujeres que varones se hayan sentido liberadas. Sólo con esto quedaría explicada gran parte del premium de felicidad post-divorcio de las mujeres.

Otros datos de interés son los elevados porcentajes que aducen infidelidad del otro cónyuge como causa de divorcio: alrededor del 35% tanto para varones como para mujeres. Y no son pocos los que reconocen su propia infidelidad como causa: en este caso más los varones (cerca de 15%) que las mujeres (cerca de 8%).

Un último dato aclara todavía más por qué las mujeres pueden sentirse más liberadas (tampoco tan más, no crean). Según ellas afirman, fueron ellas mismas las que iniciaron los trámites de divorcio en cerca del 70% de los casos (si son ellos los que responden, el porcentaje de esposas que los inició está mucho más cercano al de los varones).

Con todo, son bastantes más los varones que se han vuelto a casar que las mujeres que lo han hecho.

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(1) Se trata de una encuesta online, pero no sé más de ella. No sé si la muestra es autoseleccionada o no.